sábado, 4 de octubre de 2014

Igualdad por Sandy Riddle Black

Amanecí de nuevo a su lado, me encanta hacerlo. Sentir el calor de su cuerpo desnudo en las mañanas y su brazo rodeándome, haciéndome sentir protegido, como si nada en el mundo pudiera dañarme si estoy con él. Lo amo.

Llevamos más de 3 años de relación; él me había pedido que fuera su novio en una salida de grupo, yo lo llevaba queriendo en secreto desde mucho antes pero no sabía si el sentimiento era correspondido, a fin y al cabo, ambos somos hombres.

Después de una año de noviazgo en secreto, decidimos hacerlo un poco publico empezando por contárselo a nuestros padres, cosa que salió muy mal. Mis padres al ser religiosos, lo tomaron como una aberración. Me dijeron que si seguía con esta conducta antinatural, mejor no regresara a su casa. No lo hice.

Con los padres de mi novio no fue mejor, ellos al ser de dinero, lo desheredaron dejándolo completamente en la calle y eliminando cualquier parentesco. Actuaban como si él estuviera muerto y todo por el simple hecho de ser homosexual.

Después de eso, las cosas no fueron mejorando, la sociedad nos dio la espalda como si fuéramos la peor escoria que pudo haber pisado el planeta tierra. No conseguíamos trabajo. No podíamos quedarnos por mucho tiempo en algún sitio por miedo. Pero esos problemas no hicieron que nuestro amor cesara, si no que se fortaleció cada día más.

Yo no entendía el por qué de tanto odio hacia la gente como nosotros, los religiosos dicen que Dios ama a todos y a todo, ¿Por qué el hecho de que alguien de nuestro mismo género nos atraiga sexualmente nos hace tan  indignos de él, a tal nivel que sus seguidores nos vean como una aberración?

¿Por qué tanta discriminación hacia las personas con distintas preferencias sexuales? ¿Qué es lo que hacemos que causa tanto odio  a tal grado que lugares como en Uganda y África, las personas homosexuales son condenadas a pena de muerte?

Hay, en el mundo, asesinos, pedófilos y psicópatas que son tratadas con más respeto. Ladrones profesionales que en estos momentos dirigen naciones y a ellos no se les reclama nada. ¿Realmente valemos menos que esas personas que atentan en contra de las demás personas, cuando nosotros no les hacemos daño a nada ni a nadie?


                Se que es un sueño casi imposible, pero espero que la sociedad pronto comprenda que no somos diferente. Que no le hacemos daño a nadie por nuestros gustos. Espero que comprenda que nosotros también tenemos derecho a amar. Espero que pronto haya igualdad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario